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Por Fernanda Contreras.

Cuernavaca Mor-. Hoy, 28 de noviembre, se celebra el Día Nacional del Sordo, una fecha especial para reconocer y celebrar la cultura y la identidad de las personas sordas.

En este reportaje de Punto por Punto, conocemos la historia de Rubén Cesar Benítez García, una persona sorda que nos comparte su experiencia.

Debido a la pandemia que se vivió hace cuatro años, Rubén Cesar que tomó la decisión de iniciar cursos y diplomados que lo ayudaron a convertirse en profesor de español para sordos, en la Academia de Profesionalización Sorda y Estudios Lingüísticos (AproSEL).

En su vida cotidiana, usa la lengua de signos para comunicarse con amigos y familiares. También usa la lectura de labios y la escritura para comunicarse con personas que no saben lengua de signos.

Datos del INEGI arrojaron que en el año 2020 Morelos tenía el reporte de 126 personas con discapacidad auditiva, mientras que en México, se tienen 2.3 millones de personas, dando como resultado que el 50 por ciento son mayores de 60 años.

Rubén Cesar Benítez García, con el apoyo de sus alumnas Ivonne Marin Vicente, María Itzel Bustamante y Mayra Celina Argueta, explicó a Punto Por Punto con lenguaje de señas e interpretando con voz cuales son los desafíos que enfrentan los niños, jóvenes y adultos con esta discapacidad.

Puntualizó lo importante que es para la comunidad sorda la lengua de señas mexicana, pues existen diferentes niveles, desde el básico hasta el profesional, en donde se tiene un intérprete oyente y un intérprete sordo bilingüe, quienes se encargan de evaluar en qué nivel iniciara el aprendiz.

Por la falta de accesibilidad en lugares públicos y la falta de comprensión por parte de algunas personas, es que quienes tienen esta discapacidad enfrentan desafíos para poder realizar un trámite o darse a entender con la sociedad.

Al mismo tiempo, expuso que es muy triste darse cuenta como en México no hay maestros que sepan cien por ciento la lengua de señas, pues de ese modo desde el nivel preescolar los niños tienen complicaciones para aprender.

El alumno Carlos Caballero, tiene un año que inició el curso y expresó que aprender esta lengua para él es muy importante, pues implementará sus conocimientos en su trabajo, ya que al dedicarse a dar atención a clientes, diariamente reciben gente sorda.

Es necesario que en Morelos, la sociedad oyente entienda y respete la cultura y lengua de los sordos para que se proporcionen más recursos y servicios, como intérpretes de lengua de signos y subtítulos en los medios de comunicación.

La historia de Rubén Cesar Benítez es un ejemplo inspirador de cómo la sordera no es una limitación, sino una oportunidad para desarrollar habilidades y perspectivas únicas.

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