En la oración “por una herida que le duele a México” que tocó la violencia intrafamiliar, el secretario general del Episcopado Mexicano y obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, lamentó que en el país, siete de cada 10 niños y jóvenes viven de algún tipo de violencias.
En su homilía dominical, el líder de la curia católica en Morelos, dijo que la herida que se toca, se da en busca de recomponer el tejido social, “son millones en México que lo dicen las estadísticas como la UNICEF o el Instituto Nacional de Salud Pública, que de cada 10 niños, solo tres son educados en un entorno sin violencia, es gravísimo, porque de cada 100, el 70 por ciento de los niños en México, viven bajo algún tipo de violencia, (…) por eso estamos como estamos”.
Ramón Castro, refirió que en México, el 50 por ciento de los jóvenes y adolescentes entre los 12 y 29 años, “viven situaciones de grave conflicto en sus hogares y de ellos, el 44 por ciento se va por su entorno familiar”.
Dijo que de ahí la respuesta de porqué los jóvenes se drogan y delinquen, “no tienen un hogar, tienen un infierno, en México son 2.2 millones de personas que consumen drogas, (…) es una de las heridas que tiene México, por eso desde la iglesia se hace conciencia sobre esta realidad que se vive y pedimos a los que tienen la responsabilidad de sanar la familia, lo hagan, porque ahí está la clave, un entorno familiar sano, es un ciudadano sano”.