
Por la Redacción.
En 2023, México registró un millón 820,888 nacimientos, un 4 por ciento menos que en 2022, según datos de las Estadísticas de Nacimientos Registrados (ENR). Esta caída refleja una realidad que va más allá del deseo personal: cada vez más jóvenes deciden no tener hijos por múltiples razones. Entre alguna de ellas:
Inestabilidad económica
La principal barrera es financiera. Los jóvenes enfrentan empleos mal pagados, sin prestaciones y con jornadas extenuantes. Formar una familia en estas condiciones se percibe como una carga difícil de sostener.
Preocupación ambiental y sobrepoblación
Con más de 8 mil millones de personas en el planeta y más de 138 millones en México, hay preocupación por la escasez de recursos y el deterioro ambiental. La falta de agua, energía, educación ambiental y la explotación por parte de grandes corporaciones.
Salud emocional y traumas personales
La conciencia sobre salud mental ha aumentado, y muchos jóvenes prefieren sanar antes de asumir la responsabilidad de formar una familia para no repetir patrones dañinos.
Prioridades personales y profesionales
El desarrollo profesional y personal también pesa. Para muchos, cumplir metas académicas o emprender proyectos es prioritario.
Inseguridad y violencia
Feminicidios, robos y agresiones han convertido la inseguridad en un factor clave para muchos jóvenes al evaluar su futuro familiar.
En definitiva, no se trata solo de querer o no tener hijos, sino de las condiciones que rodean esa elección. Cada vez más jóvenes eligen conscientemente no ser padres, basados en sus valores, aspiraciones y realidad social.
Con información de Formación emocional.