
Por Ángel Álvarez.
Cuernavaca, Mor. – La falta de unidades adecuadas y de condiciones mínimas de accesibilidad impide que las personas con discapacidad utilicen el transporte público, advirtió el diputado Alberto Sánchez, quien afirmó que este sector no exige pasaje gratuito, sino un servicio digno, funcional y seguro.
El legislador señaló que, aunque en el marco legal se habla de gratuidad, en la práctica no se cumple, ya que muchas personas con discapacidad no pueden subir a las unidades por la ausencia de adaptaciones y por el mal estado del transporte.
Indicó que todas las unidades, estén o no adaptadas, deben encontrarse en óptimas condiciones mecánicas y de seguridad, pues trasladan personas y cualquier falla representa un riesgo para la integridad de los usuarios.
Sánchez enfatizó que las personas con discapacidad no buscan privilegios ni descuentos en la tarifa, sino pagar lo mismo que el resto de la ciudadanía, pero con la garantía de un servicio accesible que realmente les permita ejercer su derecho a la movilidad.