El encargado de despacho del gobierno del estado, Samuel Sotelo Salgado, indicó que no existen elementos objetivos para determinar que fue un secuestro exprés el motivo de la desaparición del obispo emérito de Chilpancingo, Salvador Rangel.

Esto, dijo, a reserva de que avancen las investigaciones por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Sotelo Salgado, agregó que sólo se tienen indicios de dos retiros de efectivo el día sábado 27 de abril, día en que ocurrió la desaparición.

Actualemente monseñor continúa en un hospital privado recibiendo atención médica y no ha podido declarar ante el Minsterio Público.