Tlaquiltenango, Mor., a 04 de julio de 2022.- Este lunes se intensificó la búsqueda de un menor desaparecido desde el Jueves, en la colonia Emiliano Zapata de Tlaquiltenango. Antonio Alexander de 11 años, quien junto con su padre Francisco Javier Mojica Urióstegui estaban trabajando en el Rancho Los Barsiles del señor Narciso, desaparecieron por lo que familiares acudieron con las autoridades para que se pudiera iniciar la búsqueda de ambas personas.
Fue primero la brigada de vecinos (con algunos de los que también participaron en la búsqueda del niño Ricardito vecino de Tlaquiltenango desaparecido y encontrado muerto en Ayala) y familiares los que se avocaron a realizar la búsqueda sábado y domingo, hallando el domingo, arriba del Rancho donde trabajaban, a Francisco Mojica muerto con signos de tortura, “con una bolsa en la cabeza y carcomido por los animales, en estado de descomposición”, así lo platicó María Inés Salgado Nava, la madre de Alexander y quien habría sido esposa de Francisco Javier.
El domingo, tuvieron que meterse personas particulares al Rancho porque estaba cerrado, sin embargo, el niño no fue encontrado, por lo que la búsqueda se intensificó este lunes con la presencia de elementos del Ejército, Policía de Investigación Criminal y los binomios (perros de búsqueda), así como el apoyo de Protección Civil Municipal.
María Inés Salgado Nava, madre de Antonio Alexander pidió encarecidamente piedad a las personas que se llevaron a su hijo y que se dieran cuenta que se trata de un pequeño que nada tiene que ver con esos actos de violencia.
El pequeño vestía una camisa negra con un logotipo verde, Pantalón de tela color verde militar de resorte y sus huaraches, una gorrita color azul mezclilla con un gallito; y un dedo lo tiene fracturado.
Dos datos que mencionaron familiares y amigos, es que hace poco más de un mes ya habían robado en ese rancho, por eso la mamá de Alexander ya no quería que el niño fuera, pero seguía mucho a su papá y ese jueves, Francisco Mojica fue por su hijo para trabajar en el lugar. El otro asunto que mencionaron fue a la pareja sentimental de Francisco Javier, quien señalaron ya se fue y no se sabe de ella.
El cuerpo del padre de Antonio Alexander, Mojica Urióstegui se lo llevaron a la SEMEFO y la madre del finado, manifestó su preocupación debido a que no tienen recursos para poder hacer los trámites para obtener su cuerpo y darle digna sepultura, ya que ella dependía del trabajo de su hijo.
Al cierre de esta edición se desconocía todavía el paradero del pequeño, el cual siguió siendo buscando de la mañana al medio día y tarde por el cerro de la colonia Emiliano Zapata.
