Cuernavaca continúa posicionándose a nivel nacional e internacional con su legado gastronómico a través de la elaboración del taco acorazado más grande del mundo, para el cual este domingo se logró batir el récord mundial al alcanzar una longitud de 78.53 metros, superando los 70.4 metros alcanzados en la edición del 2023, como un esfuerzo en conjunto entre la iniciativa privada, la sociedad civil y el ayuntamiento que dará como resultado que la capital morelense esté registrada por seis meses en los récord Guinness.

Si bien se tenía una expectativa de 75 metros lineales, con la multiparticipación de la ciudadanía y voluntarios liderados por el presidente municipal, José Luis Urióstegui Salgado y de su esposa, Luz María Zagal Guzmán, presidenta del Sistema Municipal DIF, se logró una meta de 78 metros con 53 centímetros de tradición culinaria, siendo los encargados de garantizar que la tortilla no presentara fisuras y en una sola pieza se completara con éxito, al ser el requisito para mantener el récord. 

El récord fue certificado por el notario público No. 2, Hugo Salgado Castañeda, quien estuvo presente durante el proceso de preparación para corroborar que el Ayuntamiento de Cuernavaca y la población rompieran un nuevo récord mundial.

Acompañado de integrantes del Comité Organizador liderado por César Salgado Castañeda y Angélica Alejandre Valeriano, así como miembros del Cabildo y Gabinete, José Luis Urióstegui agradeció y reconoció la unión y trabajo coordinado por segundo año consecutivo con la sociedad civil, instituciones académicas y particulares para organizar este exitoso evento y que principalmente atrae la mirada del turismo local, nacional e internacional, fomentando la fortaleza comunitaria que se debe tener en la ciudad, al convivir ciudadanos de distintas colonias y poblados y hasta de otros municipios y estados. 

La preparación del taco acorazado más grande del mundo requirió de aproximadamente 35 kilos de masa donada por el Consejo de la Masa y la Tortilla en el estado de Morelos que preside Antonio Vázquez Quezada; sin embargo, se donaron un total de 150 kilos de masa para que nadie se quedara sin la oportunidad de degustar este platillo morelense; para la elaboración fue gracias a la empresa Apolo de la Ciudad de México, que modificó una máquina especial trasladada a Cuernavaca exclusivamente para la elaboración de la magna tortilla.

La tortilla fue pasada de mano en mano a lo largo de los tablones que se colocaron desde la explanada del Palacio de Cortés hasta llegar a calle Prolongación de Hidalgo esquina con calle Gutemberg, donde al alcanzar los 75 metros lineales sin romperse los participantes continuaron con su preparación, ofreciendo diferentes guisados, arroz morelenses y rajas que fueron cocinados por manos morelenses y donados para el disfrute de los asistentes, puesto que una vez que se alcanzó el récord a cada uno de los presentes se les entregó una porción de taco para que lo pudieran degustar.