
Por Fernanda Contreras.
Cuernavaca Mor.- San Francisco de Asís, hijo de un rico comerciante, renunció al dinero y los lujos, y optó por la darle más importancia en su vida a los bienes espirituales, es festejado con fervor en la capilla ubicada en la calle Galeana del centro de Cuernavaca.
Como cada año, se cierra la céntrica calle y se instala la Feria en honor a San Francisco, además de las actividades litúrgicas en la parroquia del lugar, expresó Rosa Herrera, secretaria del comité organizador.
En entrevista para Punto Por Punto Rosa Herrera, comentó que el Santo enseñó a los católicos lo importante que es el respeto a la vida, al abandonar una vida de lujo por una vida dedicada al cristianismo después de haber escuchado la voz de Dios, que le ordenó reconstruir la iglesia cristiana y vivir en la pobreza.
El Papa Juan Pablo II fue quien lo declaró Patrono de los Animales del Medio Ambiente y de los Ecologistas.
El Santo hizo de la pobreza el fundamento de su orden los Franciscanos y el amor a la pobreza se manifestaba en la manera de vestirse, los utensilios que empleaban y sus actos.
Su humildad no era un desprecio sentimental de sí mismo, sino su la convicción de que ante los ojos de Dios el hombre vale por lo que es y no más.