
Por Fernanda Contreras.
Cuernavaca, Mor.- Las posadas, una de las tradiciones más arraigadas de la Navidad en México, van más allá de la convivencia y la celebración. De acuerdo con el sacerdote Felipe Ramos, estas representaciones recuerdan el peregrinaje de María y José en busca de un lugar donde pudiera nacer Jesús, convirtiéndose en un signo de hospitalidad, fe y preparación espiritual para las comunidades cristianas.
En entrevista explicó que las posadas están llenas de símbolos que refuerzan su sentido religioso. Las velas que portan los participantes durante la procesión representan la luz de Cristo, mientras que los cantos, las oraciones y el rezo del santo rosario marcan el inicio de cada celebración.
Posteriormente, se realiza una procesión que culmina frente a una puerta, donde se entonan los cantos tradicionales que recrean la petición de posada, hasta que finalmente se abren las puertas para dar acogida a los peregrinos.
Uno de los elementos más representativos es la piñata tradicional, generalmente en forma de esfera con siete picos, señaló que estos picos simbolizan los siete pecados capitales, y al romperla se representa la lucha contra el pecado. Los frutos y dulces que caen al final simbolizan las gracias, los dones del Espíritu Santo y la recompensa espiritual que se obtiene al vencer las tentaciones.
Las posadas se celebran durante nueve días, del 16 al 24 de diciembre, y concluyen con la convivencia comunitaria, donde se comparten aguinaldos, ponche y alimentos tradicionales. Estos regalos, señaló el sacerdote, son una forma de agradecimiento para quienes participan, ya sea en las colonias, en las familias o en las parroquias, fortaleciendo los lazos de fraternidad y solidaridad entre vecinos y feligreses.
En cuanto a la participación, el padre Felipe Ramos destacó que, aunque al inicio suelen asistir pocas personas, conforme se acercan las fechas a la Nochebuena la asistencia aumenta considerablemente. Aseguró que esta tradición no se ha perdido, aunque su permanencia depende del interés y compromiso de las comunidades.