
Por Fernanda Contreras.
Cuernavaca, Mor. – El alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui, urgió a la Fiscalía Anticorrupción a avanzar en la resolución del caso del Paseo Ribereño, un expediente que permanece abierto desde hace varios años y que involucra presuntas irregularidades en la obra pública.
Señaló que la falta de resultados ha generado incertidumbre entre los afectados.
Urióstegui afirmó que existen víctimas que aún no han recibido reparación del daño, situación que consideró inaceptable ante la prolongada investigación.
Subrayó que la administración municipal ha colaborado con la entrega de información requerida, por lo que corresponde ahora a la Fiscalía determinar los pasos a seguir.
El presidente municipal enfatizó que la autoridad investigadora debe definir sin demora si existen elementos suficientes para realizar imputaciones. Aseguró que mantener el caso en pausa solo profundiza la percepción de impunidad y afecta la confianza ciudadana en las instituciones encargadas de procuración de justicia.
Durante su posicionamiento, Urióstegui reiteró que su gobierno se mantiene a favor de la transparencia y el esclarecimiento de presuntas irregularidades cometidas en administraciones pasadas. Añadió que el ayuntamiento no intervendrá en las decisiones de la Fiscalía, pero insistió en la necesidad de que haya avances concretos. El llamado del alcalde reavivó el debate público en torno al Paseo Ribereño, un proyecto que ha sido señalado por sobrecostos y fallas estructurales.